La (como la llamó el Velvet) comuna-hippie-chic-de-diseñadores tiene un nuevo miembro: Trazo, su nombre oficial, o Pipo (según algunos groseritos), un hermosísimo gato, que de tan diminuto necesita un cascabel para evitar ser pisado (ya pasó).
Pocas cosas tan relajantes como un gato ronroneando sobre tu panza mientras lo acaricias. El dichoso Trazo (buen nombre para vivir entre diseñadores) es definitivamente un gato muy afortunado, que de tanta gente que lo quiere consentir y apapachar no conoce el suelo.
Ay¡ yo quiero mi propio gato, ya hasta tengo nombre (hasta 2 dependiendo de su color) sólo me falta el gato... pequeño detalle